Con una gran sonrisa, llena de alegría y orgullo por su madre y lo que hace, Michela Maury Oñoro es un gran ejemplo de tenacidad, talento, perseverancia y amor por la vida y el Carnaval de Barranquilla. Desde los 10 años de edad baila y canta sin parar, al punto que su madre Celia Oñoro de Maury al descubrir sus cualidades, se unió a un grupo de señoras con hijos con capacidades especiales y crearon la comparsa Ilusión del Caribe, pionera para personas con discapacidad en el Carnaval de Barranquilla.
Hoy esta comparsa celebra 26 años en el Carnaval de Barranquilla, la Fiesta donde convergen diferentes manifestaciones folclóricas donde la inclusión se encuentra presente en cada una de sus danzas, comparsas y disfraces. El motor y corazón de este grupo es Michela, quien junto al profesor de danza es la creadora de las coreografías y pasos que dan durante cada presentación. Esta no ha sido una tarea fácil asegura doña Celia, “Iniciamos con 30 integrantes, la idea era que bailaran en el Carnaval de los Niños, y hoy en día, todos son jóvenes y adultos que crecieron con la comparsa”.
Michela cumplirá en los próximos días 43 años de edad, de los cuales asegura que ha hecho de todo. Y es que ella, se ha destacado por ser una mujer polifacética. De las manualidades, pasó a ser una experta en natación obteniendo más de 80 medallas en competencias nacionales y locales de estilo libre, mariposa y pecho. Así mismo, cuenta con dos títulos, uno como Técnico en Mercadeo y Logística en Gente Estratégica, donde trabajó por 6 años, y otro como Técnico Laboral por Competencia en Auxiliar Administrativo de la Universidad Autónoma del Caribe. Hizo parte de las Casas de Cultura y de la Banda Folclórica Distrital.
Esta joven cuenta con muchos talentos y capacidades como cantar y hacer fonomímica de grandes artistas entre ellos Rocío Durcal, Ana Gabriel, Britney Spears, Madona, etc. Toca la tambora, el piano, la guitarra y la flauta. Además, fue Reina de la Fundación Fides y Reina de Barranquilla Incluyente, entre otros reinados.
En la familia Maury Oñoro, el amor, respeto y admiración es mutuo. Michela asegura que todo lo que ha hecho se lo dedica a su madre, su apoyo y mejor amiga. Y doña Celia, dice que desde que su hija nació se ha sentido orgullosa de ella y su inteligencia. Que nunca la ha escondido, sino por el contrario siempre la mostró con orgullo. Hoy Michela es su gran compañía y se siente orgullosa del trabajo que hizo como madre y que el amor es el principal ingrediente para hacer feliz a un niño con capacidad especial.